

Las actividades mineras requieren tierras que a veces compiten con las tierras utilizadas como medios de subsistencia, hogares y comunidades. En toda región donde deseamos realizar actividades de explotación, estudiamos las alternativas para minimizar las perturbaciones e implementar medidas para proteger los derechos humanos y el patrimonio cultural. En caso que la única alternativa sea el reasentamiento, trabajamos con los hogares y las comunidades afectados con el propósito de conocer sus intereses y mejorar su calidad de vida.
Reasentamiento – Cuando se evidenció que la explotación de Constancia requeriría la reubicación de 36 familias de Chilloroya, establecimos un proceso de negociación de reasentamiento que cumpla las normas internacionales relacionadas con la justicia y transparencia (incluyendo las normas de desempeño de la CFI) y que se comprometa a proporcionar viviendas de igual o mejor calidad, con mejoras tales como un mejor acceso al suministro de agua y caminos. El principio rector para el proceso fue la colaboración con los líderes comunitarios y autoridades gubernamentales así como con los individuos afectados.
Adquirimos tierras de reemplazo en cantidad suficiente para permitir que todas las familias afectadas continúen sus actividades de ganadería como vecinos en parcelas individuales y construimos dos reservorios de agua grandes y otra infraestructura para uso público. Asimismo ofrecimos mejores viviendas y se reemplazó la infraestructura de cada hogar. A solicitud de la comunidad, negociamos los acuerdos finales directamente con cada familia y las tomamos en especial consideración para contratar a sus miembros como trabajadores o proveedores locales durante la fase de construcción. Los acuerdos incluyen el reemplazo de casas, tierras de cultivo y construcciones y otro tipo de apoyo y compensaciones.
Sitios de patrimonio cultural – El Perú es un país rico en patrimonio arqueológico. Antes de iniciar la construcción, realizamos un estudio para detectar algún sitio arqueológico en la propiedad y obtuvimos un Certificado de Inexistencia de Restos Arqueológicos. El sitio cuenta con un plan de monitoreo arqueológico (PMA) con el propósito de conservar el patrimonio cultural y proteger los objetos arqueológicos que puedan hallarse. Como parte de este plan, hemos marcado las áreas protegidas, instalado señalización y seguimos recuperando nuevos objetos. Asimismo brindamos capacitación semanal sobre patrimonio cultural y concientización a los trabajadores del proyecto y miembros de la comunidad. El Ministerio de Cultura audita periódicamente el PMA y hasta la fecha todas nuestras actividades han recibido la aprobación gubernamental.
Minería a pequeña escala – En el área de Pampacancha de nuestra concesión de minerales en Constancia se desarrolla minería informal a pequeña escala. Hudbay Perú y la comunidad celebraron un acuerdo de cinco años que autoriza a una empresa comunitaria a realizar actividades mineras, siempre y cuando se efectúen en esa única área y cumplan las leyes. El acuerdo, el cual ayudó a formalizar la actividad en esa zona y a reducir el riesgo de conflictos, expira en junio de 2015. La planificación de la explotación del yacimiento Pampacancha implicará entablar relaciones con estos mineros y con la comunidad ya que necesitaremos tener acceso a porciones de estas tierras superficiales para explotar este yacimiento.